LA ESTANTERIA DE MI VIEJO

En la estantería de mi viejo, no hay realmente tantos libros. Creo que yo tengo un poco mas y mas variado. Pero está recién naciendo... No es un lugar donde yo pueda perderme entre libros y libros. Es sólo el nombre que le puse, por mencionar a mi viejo, que me estimuló indirectamente a leer.

La cosa es que, hace aproximadamente 3 meses, empecé a leer un libro llamado "Anibal, el orgullo de Cartago" de Anthony David Durham y como las tardes las paso un poco metido en los blogs, y afinando detalles de la pauta, me costó mucho terminar de leerlo. No porque no fuese entretenido, sino que mas que nada por falta de tiempo.

Debo decir que al final del libro, las ultimas páginas tienen un ritmo tan enviciante, que esas 100 o 200 páginas, no las pude soltar. De hecho un día iba caminando y tuve que detenerme bajo un arbolito para terminar de leer.

¿Y que resultó de mi lectura?.
Un analisis potente de lo que significa una guerra. Tal cual como todos sabemos, una guerra es algo tremendamente atrayente para algunas personas, o incluso es una salida para planes tetricamente planeados por altos dignatarios.
Pero en terminos generales, solo destruye.

Quizás Anibal no sabía las consecuencias de sus actos en el futuro de su propio pueblo y su cultura. Quizás sólo le tocó la mala suerte de encontrar un rival digno de su genio -Publio Escipión- que lo derrotó finalmente.
El epilogo del libro, que es historia pura, dice que esta fue la segunda de tres guerras entre Roma y Cartago, llamadas la Guerras Púnicas.

La Tercera Guerra Púnica, como se describe, fue consecuencia de esto también.
Cartago fue condenado a pagar un impuesto de guerra a Roma, por 50 años, la perder la segunda guerra, pero a los diez años ya habia florecido de nuevo, con su cultura, su comercio y sus ciudades de nuevo prósperas, y le ofrecieron a Roma, hacer pago de lo que restaba, de una sola vez. Es decir pagar los cuarenta años, en una sola cuota.

Tal esplendor y florecimiento, seguramente causó la envidia, la verguenza y el miedo reflotado de los romanos por los africanos, y solo bastó una falsa declaración de que el rey intentaba de nuevo armarse, para que Roma asediara la mismisima ciudad.
El asedio duró 3 años y finalmente, la ciudad cayó.
Los habitantes fueron literalmente aniquilados -pasados por las armas, degollando puerta por puerta- y de una ciudad de mas de 700.000, solo hubieron 50.000 sobrevivientes. Fueron quemados sus libros, arrasados sus edificios y sistemáticamente destruida toda su cultura, desapareciendo del legado histórico del mundo.
Asi, sin la amenaza de su enemigo de siempre, Roma no tuvo mas impedimentos para hacer crecer su imperio.
Actualmente, Cartago, es un solo barrio ubicado en Túnez.

¿Es por esto que el hombre va a la guerra?. ¿Para crear su imperio, destruir al enemigo?.
¿Alguna vez es para defender al más débil?. No lo creo, aunque asi lo declare.
Imperios actuales, existen, pero que reinan a través de economías poderosas, pero sin el aporte cultural que ofrecían para la época, estos pueblos.
Al final, el lector, debe reconocer, que que mejor forma de protesta ante la guerra, que escribir un libro bélico.
Reconoces el genio de algunos, la torpeza de otros, pero; la guerra, brutal e inutil, es la protagonista.


Al inicio escribí esto:

En estos días estoy leyendo "Anibal, el orgullo de Cártago".

Hace un par de años a raiz de otros libros que leí, me gustó el genero de la "novela histórica" si se pudiese llamar así. Los autores crean, historias ficticias basándose en un gran esqueleto fundado en hechos reales.

Esto quizás pueda ser censurable ya que no me imagino a Anibal Barca diciendo palabra por palabra, los que se describe en el libro.

Y aparte de eso, puedes sin ningúna dificultad enterarte del final, solo buscando referencias algún libro de Historia. En todo caso el libro cumple su función de entretener y llevarte por una de las épocas mas idealizadas del la Historia de la Humanidad.

Anibal Barca se enfrentó a los romanos en una época en que el imperio italiano, era poderoso y podría analogarse como si hoy un país pequeño intentara invadir a E.E.U.U. Y va quedando de moraleja en cada renglón, el poder del orgullo por sobre la conciencia. La soberbia y los afanes de poder por sobre los valores morales y familiares.

Quizás Anibal Barca no fué solamente un hombre en busca de gloria, sino que realmente quiso derrotar a los romanos para vengar los continuos vejámenes que ellos cometían con los pueblos sometidos.

En nuestros tiempos, no hay líderes geniales, pero si pueblos sometidos. En tanto llegue al final les cuento.

Por Pato71